¿Te gusta mezclar estilos en decoración de interiores? Si es así y te gusta huir de convencionalismos, beber de diferentes fuentes y estilos decorativos, a continuación te damos algunas pautas para ayudarte a conseguir ambientes equilibrados, donde todo encaje a la perfección. Y es que mezclar enriquece pero no es tan fácil como pueda parecer en principio.
Porque mezclar estilos es mucho más que juntar elementos dispares, de diferentes estilos y/o épocas, y ya. Si no se hace bien, solamente tendrás una mezcolanza sin sentido. Mientras que si lo haces siguiendo unas premisas, podrás conseguir una buen resultado. Necesitarás ser creativo y muchas veces romper con lo establecido pero hacerlo de manera correcta.
Mantén ordenado el espacio
Comienza por introducir en la estructura de la vivienda pocos elementos, manteniendo siempre el orden. El objetivo, una vez terminado el continente, es no saturar los ambientes con demasiados muebles y objetos, y que, al final, todo mantenga una coherencia.
Define dos estilos decorativos a combinar
Uno de ellos será el predominante, mientras que el segundo será el complementario. Aplicar la proporción 80/20% es una buena estrategia para ir añadiendo elementos, muebles y decoración de cada uno de los estilos. Una vez controlado el conjunto, puedes permitirte el introducir pequeñas dosis de un tercer estilo, aunque debes evitar que tu casa tenga referencias de demasiados estilos decorativos.
Juega con el color
A la hora de tomar decisiones, mantente dentro de una base cromática formada por un máximo de tres colores. La idea es que todo vaya encajando y el resultado global sea un ambiente equilibrado, donde cada elemento forme para de un todo.
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