¿Tienes un salón de planta alargada y estrecha? Si es así, sin duda, esto condicionará el amueblamiento y decoración de este espacio. Pero no te preocupes porque, aunque los metros son los que son, existen algunos recursos que te ayudarán a mejorar la funcionalidad y la estética de tu salón.
Lo fácil sería meterse en obras y anexar metros de otra habitación a tu salón, pero como sabemos que no es esto lo que quieres sino maximizar los metros que tienes disponibles, presta atención a estos 5 consejos que te damos a continuación.
MENOS ES MÁS APLICADO A TODO
Desde la elección de las piezas de mobiliario, pasando por la elección de colores para paredes, y terminando con la decoración del espacio. Todo es importante: Contar con lo imprescindible sin añadir nada que no necesitemos realmente; Mantener a la vista el mínimo de objetos y jugar con el color para «agrandar» el espacio visualmente, más de lo que en realidad es. Menos es más, es una máxima en el diseño de interiores.
COLORES IDEALES PARA UN SALÓN ESTRECHO
Cualquier color que te guste es válido, siempre y cuando no lo elijas en tonos demasiado oscuros y/o saturados. Lo ideal es elegir colores que reflejen la luz y aporten luminosidad al espacio, ayudando así a ver la habitación menos estrecha. Blanco, beige, taupé, gris y greige son algunos de los más adecuados para ambientes neutros, pero si tu estilo es más vivo y colorista, puedes jugar con otros colores aunque, en este caso, es recomendable optar por tonos cuanto más pastel, mejor.
En cuanto al mobiliario, si los eliges en color madera, hazlo en aquellos tonos más claros y luminosos, que recargan menos el espacio.
ASIGNACIÓN DE ZONAS EN SALONES ESTRECHOS
Una vez elegida la gama cromática con la que vamos a pintar nuestro salón-comedor, hay que definir qué áreas o zonas irán destinadas a cada una de las zonas: Esto es, un espacio dedicado a salón donde ver la televisión, relajarnos, leer, etc… y otra que será ocupada por la mesa del comedor y, posiblemente, algún mueble donde guardar vajilla y cristalería junto a esta.
Lo habitual es asignar el mayor espacio de la habitación a aquella zona que más va a ser utilizada, lo cual suele ser casi siempre la zona del salón, que es donde pasaremos la mayor parte del tiempo. Una vez definidas las zonas, es decir, donde irá el sofá y la televisión, y la mesa con las sillas, habrá que decidir el tamaño y forma de cada una de las piezas principales de mobiliario.
TAMAÑO DEL MOBILIARIO PARA SALONES ESTRECHOS
En habitáculos alargados y estrechos, que es el caso del que estamos hablando, lo mejor es renunciar a un sofá con chaise longue y decantarnos por un sofá lineal del mayor tamaño posible (teniendo en cuenta siempre las plazas que vamos a necesitar a diario). Si las plazas de asiento no son suficientes para todos los usuarios, podemos complementar con uno o dos pequeños asientos, tipo butaca, de dimensiones reducidas para no recargar el espacio.
Si frente al sofá no nos queda espacio para añadir un mueble para el televisor, podemos colgar éste, directamente a pared. Pero si sí podemos permitirnos ubicar un mueble para él, quizás lo ideal sería elegir uno lo más ancho que nos permita esa pared y aprovechar para guardar en él, la vajilla y otros enseres, ahorrándonos así el tener que añadir otro mueble en la zona del comedor para estas funciones.
En cuanto a la mesa del comedor, elígela de la forma más parecida al espacio del que dispongas (redonda en espacios cuadrados y rectangular en espacios alargados), y a ser posible extensible por si en algún momento determinado necesitas contar con más plazas.
Cuanto más simples y menos ornamentados sean los muebles, mayor sensación de amplitud tendrás.
Fotos: estliving.
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